UGT ha rendido un homenaje, este miércoles, con una ofrenda floral en el cementerio de Palma, a los 97 trabajadores, la mayoría mujeres y niñas, que murieron en 1895 en el accidente laboral del polvorín de San Fernando.
También ha recordado a las nueve personas que han muerto este año mientras estaban trabajando o iban a trabajar.
Durante el homenaje, UGT ha destacado que «una tragedia de estas dimensiones no se debe olvidar porque no se puede permitir que una negligencia empresarial, como la que se cometió hace 120 años, vuelva a pasar», y ha vuelto a denunciar que Baleares continúa siendo la comunidad con más accidentes laborales en relación al número de afiliados a la Seguridad Social.
Accidente
El accidente laboral del polvorín de San Fernando, situado en el revellín de Can Pelat -aproximadamente donde ahora está el edificio de Hacienda en la calle Cecili Metel-, ocurrió mientras un centenar de trabajadores estaban recuperando pólvora y otros materiales obsoletos que habían servido de munición del ejército español.
Toda Mallorca y el resto de España se conmovió por el suceso, lo que provocó que se abrieran cuentas de donaciones y colectas para todo el país. Sin embargo, el sindicato lamenta que con los años «se ha borrado del recuerdo uno de los accidentes laborales más sangrientas del país».
UGT ha expresado que quiere mantener el recuerdo vivo «porque algunos empresarios en el siglo XXI todavía tienen el objetivo de reducir al máximo los costes de producción para sacar la máxima rentabilidad sin pensar en la seguridad de los trabajadores».
En este sentido, UGT ha denunciado que «esta situación, salvando las distancias, se da en España por la falta de inversión de las empresas en prevención de riesgos laborales, lo que ha provocado un incremento de la siniestralidad laboral en los años de crisis». «Se ha hecho mucho para instaurar protocolos de prevención pero aún no es suficiente para garantizar la seguridad de todos los trabajadores y trabajadoras», ha concluido.