La portavoz popular en Cort, Margalida Durán, ha denunciado este viernes que el Ayuntamiento de Palma está gastando más de 1.000 euros diarios en asesorías externas, auditorías e informes, contabilizando solamente, según ha destacado, los departamentos de los que el grupo municipal del PP ha podido obtener datos concretos.
Así, ha indicado que en el transcurso de poco más de 140 días de legislatura, el coste de estas contrataciones y encargos se eleva ya a 144.525 euros, a razón, por tanto, de más de 1.000 euros diarios.
Por ello, Durán considera «una absoluta incoherencia y un lamentable despropósito» que el Ayuntamiento de Palma dedique esta cantidad económica diaria en contratar informes y asesorías externas, «mientras todavía hay ciudadanos que no han superado las consecuencias de la crisis».
En su opinión, este tipo de actuación «pone de manifiesto que para el pacto de izquierdas de Cort la prioridad no son las personas afectadas por los desahucios, ni los niños con problemas de malnutrición, o las familias más castigadas por la crisis. La prioridad son ellos mismos, y sus ideas. Y nada puede resultar más incoherente que haber prometido una cosa, y hacer exactamente la contraria», ha aseverado.
En este sentido, Durán ha incidido en que los partidos que conforman la mayoría en el Consistorio «hacen gala de un comportamiento sectario y excluyente, como demuestran en el tema del proyecto de demolición de sa Feixina, y un espíritu altamente derrochador, del que son fiel reflejo el aumento del 40% en la incorporación de altos cargos políticos».
Por último, ha calificado de «irresponsable» la actuación del equipo de gobierno en materia de contrataciones externas, y ha recordado que «todavía quedan en Palma muchos ciudadanos que afrontan dificultades y aquello que esperan de la administración es que les ayude a salir adelante, no que despilfarre el dinero público en duplicar trabajos que perfectamente pueden realizar los funcionarios municipales».
Es este «comportamiento derrochador» el que, según la portavoz del PP, «provoca que el gobierno de Cort tenga luego que buscar dinero de donde sea, y deba subir la tarifa del IBI a las viviendas más modestas».