El ataque terrorista del miércoles en las inmediaciones del Museo del Bardo, en la capital tunecina, que causó 23 muertos de los que 20 son turistas extranjeros ha supuesto un duro golpe a la industria turística del país. El sector es uno de los principales motores de la economía de Túnez, con gran presencia de las principales cadenas hoteleras vacacionales del mundo.
Los grupos mallorquines Riu e Iberostar tienen catorce establecimientos en el país, de ahí la máxima alerta de los empresarios de la Isla.
La cadena hotelera presidida por Miguel Fluxá tiene en la actualidad cuatro hoteles en el país, en cuatro ciudades diferentes. Desde Iberostar no quisieron realizar ninguna declaración y aguardan máxima prudencia respecto de los últimos acontecimientos.
Riu tiene mayor presencia en Túnez, con diez establecimientos repartidos en cuatro ciudades, y desde la empresa indicaron que los establecimientos tunecinos funcionan con normalidad y que ninguno de sus clientes se vio afectado. Asimismo, aseguraron que es pronto para valorar las consecuencias del ataque en el país.