El teletrabajo en la Administración balear no consigue cuajar entre los funcionarios. Quedan pocos meses para que se cumplan los dos años de su puesta en marcha y solo 41 personas se han acogido a la nueva modalidad laboral. Concretamente, 33 mujeres y 8 hombres.
La cifra de ‘funcionarios teletrabajadores' es poco significativa si tenemos en cuenta que 4.229 empleados, entre personal funcionario y laboral de Administración General CAIB, podrían solicitar el teletrabajo. De las 66 solicitudes recibidas desde la entrada en vigor del Decreto de teletrabajo, se han denegado 25, principalmente por no cumplir alguno de los requisitos exigidos.
El director general de Funció Pública, Administracions Públiques i Qualitat dels Serveis, Antoni Mesquida, atribuye la baja cifra a que «estamos en un país donde no hay costumbre de trabajar desde casa. Además, esto no es Estados Unidos, donde las distancias para ir a la oficina son de horas». Mesquida defiende que «el teletrabajo no ha sido un fracaso, es un proceso lento» y destaca que hoy por hoy «no se ha tenido que revocar ningún permiso».