El PSIB ha lamentado este martes la opacidad con la que se ha presentado el proyecto de ampliación del Club de Mar en Palma, un plan que considera fruto de la «fiebre especulativa» en las infraestructuras náuticas que ha generado la Ley de Puertos del PP.
La concejala socialista en el Ayuntamiento de Palma, Begoña Sánchez, ha lamentado que el proyecto de ampliación del Club de Mar se haya presentado a la Autoridad Portuaria con el desconocimiento de los partidos de la oposición, teniendo en cuenta que se trata de una infraestructura de grandes dimensiones «que modifica la fachada marítima de Palma y la condiciona hasta 2021, por espacio de tres legislaturas».
El hecho de que los socialistas hayan conocido el proyecto para el nuevo Club de Mar a través de las informaciones periodísticas, hace que su opinión al respecto sea «prudente», si bien rechazan algunas de las cifras y magnitudes difundidas.
Sánchez ha cuestionado que «proyectos de esta importancia en la relación ciudad-puerto no estén sometidos al debate», y que por tanto sea la iniciativa privada la que comande en procesos que modifican profundamente la fisonomía de la ciudad, «en detrimento de los criterios guiados por el interés general y el bien común».
«Se demuestra que los cambios efectuados por el PP en las normativas estatal y autonómica han provocado una verdadera fiebre constructiva en contra del talante de nuestra ciudad», ha añadido la edil socialista.
El portavoz adjunto del grupo socialista en el Parlament, Vicenç Thomàs, ha recordado otros proyectos en la línea del de ampliación del Club de Mar, como el ya conocido para el Club Náutico del Molinar y ha dicho que surgen «debido a las modificaciones que el PP ha introducido en la legislación» y en concreto en la Ley de Puertos.
Los socialistas ya alegaron durante el debate de la reforma de la Ley de Puertos que lo que de verdad perseguía el PP era facilitar a los promotores privados los procedimientos de reforma, ampliación y construcción de Puertos en Balears, aminorando el control que las administraciones locales, ayuntamientos y consells.
«Es a través de estos proyectos de ampliación como los concesionarios pueden optar a la renovación de sus concesiones», ha recordado Thomàs, que cree que la recuperación económica de la anunciada inversión privada de 60 millones de euros para el nuevo Club de Mar solo es posible en base a la especulación urbanística de los edificios que se planean construir.
«Este es uno de los errores que nos ha llevado hacia la crisis económica que padecemos», ha reprochado Thomàs.
El diputado socialista ha recordado además que la nueva legislación estatal prevé que el 50 % de los beneficios que se obtengan de la explotación de los Puertos deben destinarse a las arcas del Estado.
La reforma integral de las instalaciones contempla la demolición de los edificios existentes, construcción de nuevos inmuebles, ampliación de la marina en 7.150 metros cuadrados de superficie y del espejo de agua de abrigo hasta 93.393 metros cuadrados, un 39 % más que la actual.