Todos los trabajadores de la planta de Coca-Cola de Palma -igual que los de Asturias y Alicante- se han adscrito a las medidas voluntarias planteadas por el embotellador Coca-Cola Iberian Partner en su ERE, que contempla el cierre de las fábricas. Dentro de estas adhesiones figuran los trabajadores que ha solicitado bajas voluntarias, prejubilaciones y los que han cursado solicitudes de traslado a otros centros.
La responsable de Industria de UGT en Balears, Rosa García, aseguró que los trabajadores de Palma «todavía no saben cuándo cerrará la planta». Lamentó la «falta de información» y explicó que los empleados «todavía no han firmado ninguna carta de despido». En este sentido, puntualizó que el único trámite que han llevado a cabo los empleados es adherirse al ERE de la empresa a través de internet.
Por otra parte, García destacó que desde el diez de febrero ya no se embotella ningún refresco en la planta de Palma y que todos los productos de la marca que se consumen en Balears llegan de la Península. «La situación de desinformación es insostenible y los empleados quieren explicaciones», dijo.