El Govern y la oposición salieron ayer más enfrentados que nunca del pleno final de los Presupuestos que, a la hora de elaborar esta información, se ceñía al guión del que se celebró el día anterior: rechazo a las enmiendas del PSIB y Més y censura de los portavoces de ambos partidos a las políticas del Ejecutivo.
La sesión, lenta y farragosa, no abrió ninguna puerta para el acuerdo. La sesión matinal -que comenzó con el debate de las cuentas de la Conselleria d'Agricultura- se inició con bronca y polémica. Biel Company, cansado de críticas, recordó que también el Pacte había gobernado con partidos implicados en casos de corrupción. Fue en ese punto cuando la diputada de Més Fina Santiago, puso sobre la mesa de su escaño una caja de Cola-Cao que es el símbolo que marca la corrupción en la época de Jaume Matas.
Llei de Símbols
Mabel Cabrer, portavoz del PP, afirmó que era imposible aceptar enmiendas de la oposición ya que descolocaban las partidas generales e incrementaban el déficit. Antoni Pastor (no adscrito) dijo que no recordaba ningún debate con tan poca disposición del PP a aceptar enmiendas.
Por la tarde, antes de que se celebrara la última votación (y a la vista de que no se aceptaba nada), el PSIB anunció que sus parlamentarios no iban a participar en el brindis que había quedado convocado para el final de la sesión. Més ya había anunciado su ausencia.
Varios diputados, entre otros David Abril y Cosme Bonet, optaron por lanzar comentarios sobre el debate a través de sus cuentas de Twitter. Criticaron las intervenciones de los consellers, la falta de acuerdos e incluso detalles sobre otros sucesos del interior del salón de sesiones. Desde el PP se optó por repetir los anuncios más destacados desde la conselleries.
Los Presupuestos de la Comunitat Autónoma para 2014, que quedaron aprobados ayer, salen del pleno como entraron: el Ejecutivo dispondrá de 3.800 millones.
La polémica no termina con la sesión de ayer ya que el pleno continuará esta para abordar otra cuestión polémica: la Llei de Símbols. Coincidiendo con el pleno se ha convocado una concentración de protesta frente a la Cámara balear.