Cuatro días después de que, el pasado martes, el Tribunal Supremo confirmara a Maria Antònia Munar la condena de cinco años y seis meses de prisión por malversación y prevaricación cometidos en el llamado 'caso Maquillaje', la expresidenta del Consell y del Parlament aprovechó el pasado viernes por la noche las redes sociales para enviar su último mensaje.
En el texto, escrito por su hijo en catalán, comienza con un «buenas noches a todos y a todas. Mi madre se quiere dirigir a todos vosotros por última vez a través de este perfil de Facebook» que, anuncia, será cerrado en pocos días. Y agradece «muy sinceramente» el apoyo que ha recibido en los «momentos más difíciles de su vida», un apoyo que tendrá «siempre presente».
Prisión preventiva
En la misiva se hace referencia también a la situación de prisión preventiva impuesta a la expresidenta el pasado mes de julio, una situación que le «duele mucho» porque «no existía el más mínimo riesgo de fuga». En este contexto, explica que a causa de esta medida no pudo practicarse pruebas médicas pendientes y que «eran muy importantes en la recuperación del cáncer» que padece. Insiste también en el hecho de que la orden de prisión preventiva no le permitió despedirse de su familia ni prepararse psicológicamente para entrar en la cárcel.
Explica el hijo de Maria Antònia Munar que su madre está intentado asumir ahora «una sentencia que no ha querido tener en cuenta una prueba muy importante que demostraba su inocencia: los certificados de los chóferes».
«Ante la acusación de haber dado dinero a Miquel Nadal en el coche oficial para la compra de Video U, el 21 de noviembre de 2004, mi madre demostró que aquel día había participado en un acto de la tercera edad que contó con la asistencia de más de cien personas». Y prosigue: «Se presentaron más de tres certificados que demostraban que aquel día el coche oficial no se había movido de la sede del Consell de Mallorca y que ella no había realizado ningún acto como presidenta del Consell. A pesar de estas pruebas tan claras y contundentes, la han querido condenar».
Finalmente, Munar envía un agradecimiento especial a todas las personas que firmaron el documento impulsado por su familia para demostrar que no había riesgo de fuga.