Balears es la única comunidad autónoma que el curso pasado perdió alumnos, en contra de la tendencia del resto de autonomías en las que creció el número de escolares de Enseñanzas de Régimen General no universitarias. En todas, pues, menos en la balear, continúa el crecimiento, aunque débil, de este alumnado iniciado hace unos años, aunque ya sin el efecto de la incorporación de alumnado extranjero.
Según los datos hechos públicos por el Ministerio de Educación relativos al curso 2012-2013, en las Islas se matriculó el pasado curso un 0,3 por ciento menos de alumnos que el anterior (579 escolares), ante un crecimiento medio a nivel nacional del 1 por ciento. En cabeza de este incremento destaca La Rioja, con una subida del 5,3 por ciento (ver gráfico). Esos 579 estudiantes menos en Balears, sumando todos los niveles, afectan casi por completo a los centros privados-concertados, que perdieron 507 alumnos, frente a los 72 de los colegios públicos.
El descenso de alumnos en las Islas se da sobre todo en los niveles de Infantil (-963 en el primer ciclo y -494 en el segundo ciclo). En otros niveles como Primaria o ESO la cifra de estudiantes crece, y se vuelve a constatar un decrecimiento de nuevo en Bachillerato.
Ese descenso de alumnos de Infantil matriculados no es una rareza de nuestro territorio, sino que se ha constatado de forma generalizada en todas las comunidades. La explicación es que esta afectando de forma significativa el descenso de los nacidos a partir del año 2009, los cuales ya están escolarizados en este nivel.
En las Islas también se perdieron alumnos en Bachillerato, otro nivel no obligatorio, con un decrecimiento de 365 estudiantes entre los dos cursos de referencia. Aquí, la caída se da más en los centros públicos.
Por otro lado, Balears está a la cabeza en volumen relativo del alumnado extranjero en las aulas, con un 14,6 por ciento, sólo detrás de La Rioja, con un 15,2 %.