Tomeu cogió emocionado en sus brazos a la pequeña Shandra, el primer bebé nacido por cesárea con acompañante en el paritorio en un hospital público de las Islas, bajo la atenta mirada de su madre Amparo.
Este hecho sucedió hace pocos días en el Hospital Universitari Son Espases, el primer hospital público balear que posibilita el acceso del padre o un acompañante en la práctica de una cesárea.
Shandra, una niña de 39 semanas de gestación, que pesó 3,5 kg, estuvo en brazos de su padre, acompañando a su madre, mientras los ginecólogos finalizaban la intervención quirúrgica.
El padre reconocía estar emocionado, mientras que la madre, una vez finalizada la cesárea, explicaba que «es un alivio saber que tienes a tu lado a tu pareja, y que por ejemplo ayuda mucho cogerle la mano».
Según explicó el jefe del Servicio de Ginecología de Son Espases, el doctor Manuel Usandizaga, «es muy importante el apoyo moral y el acompañamiento de la madre, en estos momentos tan importantes».
El Hospital Son Espases ha aprobado un protocolo de acompañamiento y piel con piel en la cesárea. El objetivo que se pretende es el acompañamiento del padre o de la persona que la mujer elija durante la realización de la cesárea.
Iniciativa
Esta iniciativa va dirigida especialmente a las cesáreas programadas con anestesia regional en gestaciones de 37 o más semanas, en las que no se prevén complicaciones. Se excluyen de este protocolo las cesáreas urgentes, con complicaciones previsibles, o con sospecha de patología fetal.
El acompañante se tiene que vestir con el uniforme quirúrgico que el personal de enfermería le proporciona. Una vez dentro del quirófano se sitúa en el cabezal, al lado de la madre. Y le da apoyo hasta el alumbramiento.