Los problemas en las subestaciones urbanas de suministro eléctrico en Mallorca que dependen de Endesa y afectan a los usuarios cuentan ya con mejores soluciones automáticas.
Endesa ha invertido 770.000 euros en trabajos de mejora de las protecciones activas y pasivas de seguridad y prevención de sus subestaciones urbanas en Mallorca, lo que significa contar con dispositivos tecnológicos de última generación para detectar y dar respuesta activa en caso de incidentes relacionados con sus instalaciones.
En concreto la empresa de distribución de energía eléctrica ha llevado a cabo a cabo mejoras en sus instalaciones de las subestaciones de Coliseu, Nuredduna, Santa Catalina, Son Molines y Palma Nova.
Entre las acciones llevadas a cabo destacan la división por sectores de las cabinas de cada subestación; la mejora del aislamiento de las salas de transformación y la protección contra incendios de los forjados de cada una de las instalaciones.
También han sido introducidas por parte de Endesa en sus instalaciones urbanas mejoras como la instalación de hidratantes en zonas públicas urbanas a su cuidado, protecciones de seguridad en los sistemas de ventilación y deterctores de incidentes en las salas de transformadores.
Según fuentes de la empresa estas actuaciones «son de mejora de las instalaciones generales y de carácter preventivo por lo que se refiere a cualquier tipo de incidentes».
Las mismas fuentes añadieron que «con la instalación de modernos dispositivos tecnológicos de detección y respuesta pasiva y activa se proporcionarán mejores soluciones en términos de tiempo y calidad en el caso de que se produzca cualquier incidente que afecte al servicio».