El Grupo de Delincuencia Económica de la Policía Nacional detuvo ayer a tres empresarios supuestamente relacionados con la falsificación de partes de trabajo en las labores de mantenimiento de las autovías Ma-19, Ma-20 y Ma-1 pertenecientes al Consell de Mallorca, y también, por realizar obras en propiedades de políticos de la extinta Unió Mallorquina, entre ellos, el exvicepresidente del Consell de Mallorca, Antoni Pascual.
Según confirmaron ayer a este diario fuentes judiciales, la operación, que está bajo secreto, se inició hace varias semanas, cuando un grupo de trabajadores de la UTE encargada de las obras de las autovías, Urbient y Vopsa, denunciaron a la Fiscalía diversas irregularidades, entre ellas, que les obligaba realizar trabajos particulares en edificios y lugares totalmente ajenos a las autopistas. Las detenciones fueron ordenadas por la titular del Juzgado de Instrucción 5 de Palma, Ana Sanjosé.
Los detenidos son un alto cargo de Logística Urbana Ambiental SA (Urbient), F. S., un directivo de esa empresa J. P., que hoy pasarán a disposición judicial tras ser interrogados anoche por los fiscales anticorrupción Miguel Ángel Subirán y Ana Lamas. Un tercer detenido, empleado de Urbient, quedó en libertad ayer por la tarde. En principio, se sospechaba que el empleado pudo haber destruido pruebas cuando la sede de la empresa fue objeto de un registro, pero más tarde se demostró que no era así.
Los investigadores sospechan que se realizaban trabajos particulares a políticos del Consell de Mallorca en la etapa de UM, con el objetivo de asegurarse futuros contratos.