Balears pierde población por primera vez en décadas y a 1 de enero de 2013 vivían en las Islas 1.110.062 ciudadanos, 9.377 menos que un año antes, según el avance del padrón facilitado ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La razón de este descenso hay que buscarla en la crisis económica y en la marcha de 18.965 extranjeros, una cifra muy notable comparada con los 242 extranjeros que habían abandonado las Islas un año antes.
Pero hay otro dato relevante que da una idea de los profundos cambios demográficos que puede provocar la crisis económica: la mayor parte de esos extranjeros que han abandonado las Islas no son sudamericanos o africanos, como podría pensarse, sino ciudadanos de la Unión Europea.
Alemanes
De esos 18.965 extranjeros que abandonaron las Islas el año pasado, 15.166 eran ciudadanos europeos y de ellos, 6.824 eran alemanes. El descenso de residentes germanos en la Isla es algo nunca visto en la Comunitat ya que la llegada de alemanes ha sido imparable desde comienzos de los años 90. También es significativo el descenso de ciudadanos procedentes del Reino Unido, colonia que en un año ha experimentado un descenso de 1.996 residentes.
Por detrás de los europeos, el colectivo que más retrocede en población es el de los sudamericanos: por segundo año consecutivo hay un descenso en el número de residentes sudamericanos.
Sudamérica
El año pasado se fueron de las Islas un total de 4.482, lo que representa un descenso del 9 por ciento. Más de una cuarta parte de ellos corresponde a los nacidos en Ecuador y el año pasado se fueron de la Comunitat un total de 1.314 residentes de este país americano.
El contraste con el descenso en estos dos colectivos lo encontramos en los extranjeros procedentes de África y de Asia. El número de africanos se mantiene estable y los marroquíes, un total de 24.473, son la segunda nacionalidad por debajo de los alemanes. El colectivo de asiáticos sigue subiendo, aunque en conjunto siguen siendo minoritarios.