José Manuel Alcaraz, exjefe de Gabinete de la Conselleria de Comercio cuando su titular era Josep Juan Cardona, ha apuntado que el exalto cargo fue quien encargó la elaboración de unos folletos electorales del PP de cara a los comicios de 2007, si bien ha manifestado desconocer si el transporte de esta propaganda desde Mallorca a Ibiza y Formentera fue sufragado con fondos del Consorcio de Desarrollo Económico de Baleares (CDEIB).
En su declaración como testigo en el juicio que desde la pasada semana se celebra en la Audiencia Provincial de Baleares por el caso Scala, Alcaraz, actual delegado territorial del Govern en Formentera, ha recordado que Cardona encargó estos trabajos al publicista y acusado Joan Rosselló, mientras que en su propio caso su intervención en este sentido se limitó a mediar respecto a los contenidos que debían incluir los folletos.
Más allá de eso, ha explicado que no tenía funciones en relación al pago de la publicidad, incidiendo en que su labor «no era la de decir a qué imprenta debía imprimirla ni qué empresa debía transportarla». Mientras tanto, ha recordado que Rosselló nunca le habló de temas económicos y «en ningún momento se dirigió a mí» para comentarle si el empresario reclamaba al PP los 36.000 euros que le había costado la elaboración de los folletos.
Por otro lado, el testigo ha recordado que como jefe de Gabinete acompañaba a Cardona en la mayoría de sus viajes, en los que en varias ocasiones el equipo «más cercano al exconseller nos alojábamos en hoteles de cinco estrellas», tal y como ha respondido a preguntas del fiscal anticorrupción Juan Carrau.
EL TRANSPORTISTA: «ME DIJERON QUE CARGASE LA FACTURA AL CDEIB»
Mientras tanto, también ha sido interrogado como testigo el transportista que se ocupó del desplazamiento de la propaganda electoral, quien ha señalado que le hicieron cambiar el concepto de la factura que libró por el desplazamiento de la mercancía, en la que hizo constar que se trataba de productos típicos 'Cinco Estrellas'. Más en concreto, ha afirmado que esta instrucción se la dio Antonio Munar -acusado en este caso-, que era la persona del CDEIB con la que mantenía el contacto.
Más tajante se ha mostrado al aseverar que Munar fue quien le dijo que el presupuesto del transporte «se cargase al CDEIB». En cualquier caso, ha asegurado que no sabía «qué transportaba ya que no podía abrir los paquetes, únicamente me llamaron de urgencia para transportarlo; no caí en que fueran del PP y que se estaba pagando con dinero público», ha recalcado en referencia a la factura de 10.585 euros que, según los investigadores, fue abonada por el CDEIB por el transporte de 6.000 kilogramos de folletos electorales.