La diputada del grupo parlamentario socialista, Pilar Costa, ha pedido este jueves en el Parlament que se abone el 25% de la paga extraordinaria de Navidad a los empleados públicos de Baleares, correspondiente a la parte proporcional de la misma, del 1 de junio al 13 de julio, hasta el día en el que se aprobó el Decreto por el Gobierno de España, tal y como ha sugerido la Defensora del Pueblo.
En este punto, la diputada socialista ha apuntado las consecuencias negativas que tendrá que los funcionarios dejen de percibir esta paga extra, ya que supondrá que la economía deje de ingresar 300 millones de euros esta Navidad, según ha apuntado el Centre de Reserca Econòmica (UIB-Sa Nostra), ha indicado Costa.
Con todo, la diputada del PSIB ha criticado asimismo que desde el inicio de la legislatura los empleados públicos «están padeciendo una serie de declaraciones por parte de su Govern que los criminaliza constantemente lanzando dos mensajes; que sobran los empleados públicos en la comunidad y por lo tanto no hacen mucho trabajo, y por lo tanto han de trabajar más y cobrar menos».
El conseller de Presidencia, Simón Gornés, ha dicho que en ningún momento están «criminalizando» a los funcionarios y ha admitido que los recortes que les afectan responde «a decisiones difíciles pero que son necesarias par salir de esta situación», si bien, ha indicado que espera que estas medidas sean «las más provisionales posibles».
Gornés ha negado las afirmaciones de la diputada y se ha referido a la auditoría técnica realizada por el Govern que apunta a que los empleados públicos «son necesarios». Un extremo que ha rebatido Costa, quien ha criticado que «se esté dando la paradoja de que mientras la auditoria dice que faltan personas, se esté echando a gente del Ibanat y en Espais de Natura».
«La auditoria no dice nada de lo que apunta usted. No sé que texto ha leído», le ha espetado el conseller, quien le ha recordado a Costa que lo «injusto» es que el anterior Govern dejara una deuda en su departamento de 92 millones.