Los sindicatos con representación en Son Espases pedirán la próxima semana la destitución del gerente y el director de gestión del hospital por su actuación en el conflicto que ha generado la implantación del cobro del aparcamiento.
El secretario de Organización de SATSE, Óscar Jódar, ha asegurado que este sindicato junto a UGT, CCOO, USAE y CSIF presentarán la próxima semana un escrito en el que solicitan la destitución del gerente de Son Espases, Juan Sanz, y el director de gestión, Rafael Marcote.
En opinión de los sindicatos, la gestión y el conflicto que ha generado el cobro del aparcamiento «se les ha ido de las manos» a estas personas porque «no han sabido reaccionar ni gestionar el problema ni defender el interés público».
El anuncio del cobro del aparcamiento de Son Espases generó las protestas de los trabajadores que se concentran dos veces al día en contra de la implantación de la medida, que se puso en marcha el pasado 1 de septiembre por decisión de la gerencia del hospital.
Incluso ayer se produjo la detención por unas horas de una ginecóloga del centro hospitalario por desobediencia y por negarse a identificarse, según la Policía Nacional.
Tras la detención, los ánimos de la gente están más caldeados, según el representante de SATSE, que opina que tanto la gerencia del hospital como la Conselleria de Salud, Familia y Bienestar Social «dan carta libre a la Policía» para tratar a los trabajadores «como sospechosos».
Los trabajadores insisten en que la concesionaria del «parking» no ha cumplido el contrato, ya que el aparcamiento tiene defectos estructurales que hacen inviable su cobro, por lo que consideran que el contrato con la empresa debe ser renegociado por parte de la gerencia del hospital.
«La gerencia no quiere renegociar y está tapando cualquier defecto del aparcamiento», ha indicado Jódar, que ha reivindicado un «'parking' suficiente y gratuito para trabajadores y usuarios».
Gerente
Por su parte el gerente de Son Espases, Juan Sanz, ha opinado que es una «extralimitación» por parte de los sindicatos con representación en el centro sanitario pedir su dimisión por su actuación en el conflicto que ha generado la implantación del cobro del aparcamiento.
En declaraciones a Efe, Sanz ha afirmado que «todo el mundo está en el derecho de solicitar lo que crea conveniente», pero ha considerado que no es adecuado pedir su dimisión por la puesta en marcha de un servicio del hospital como es el aparcamiento de pago, ya que responde a un contrato que se tiene que cumplir.
«Respeto mucho la solicitud de los sindicatos, pero evidentemente no la comparto de ninguna de las maneras», ha indicado Sanz, quien ha recordado que la explotación del aparcamiento forma parte de un gran contrato para la financiación y explotación del hospital.
Este centro, ha incidido, se ha construido en base a una determinada financiación que engloba ingresos a la empresa concesionaria por parte de la Administración en base a cánones y también ingresos por la explotación de servicios como locales comerciales, cajeros y el propio aparcamiento.
Preguntado acerca de si sería conveniente renegociar el aspecto del aparcamiento con la concesionaria, ha opinado que ahora hay definido un balance de ingresos y gastos que está «equilibrado» y que «no es posible» que el aparcamiento pase a ser gratuito para todo el mundo, tal y como piden los sindicatos, porque el centro no tiene disponibilidad «de asumir un gasto de este tipo».
El gerente ha recordado que actualmente hay 930 plazas gratuitas para los trabajadores y otras 370 plazas para usuarios en un solar próximo habilitado por el Ayuntamiento de Palma, que las motocicletas pueden aparcar sin gasto y que hay varias líneas de autobús que conectan el centro hospitalario.
En los primeros días de puesta en marcha del aparcamiento de pago para usuarios, ha informado el gerente, una de sus plantas se encuentra a un 50 % de utilización y la otra a un 30 %.
Sanz también se ha referido a la detención ayer, durante una protesta contra el aparcamiento de pago, de una ginecóloga por desobediencia a la autoridad, un suceso que ha calificado de «desagradable».
«No es agradable para ninguna de las partes, ni para el hospital, ni para la ginecóloga ni tampoco para la policía, detener a una persona por desacato a la autoridad», ha explicado, a lo que ha añadido que ahora «hay que asumirla» y «aceptarla» porque «los hechos están ahí».
Ha añadido que la actuación policial nada tiene que ver con la Gerencia del hospital, ya que los agentes siguieron sus criterios profesionales. «No tenemos capacidad de decidir ni ordenar nada a las fuerzas del orden», ha puntualizado.
La concentración de las 7.30 horas de hoy ha contado con la presencia de unas 150 trabajadores, según el secretario de Organización del Sindicato de Enfermería. Este mediodía, a las 14.30 horas, volverán a concentrarse en la tónica «pacífica» habitual, ha añadido.