El Sindicato Médico de Balears (Simebal) convocó ayer una huelga indefinida de facultativos de la sanidad pública a partir del 6 de julio, como señal de protesta contra la decisión del Govern de dejar de pagar a los médicos los complementos que están cobrando desde 2008, aunque continúan negociando con el Govern una salida pactada para este conflicto.
La huelga indefinida para unos 3.000 médicos de la sanidad pública empezará -si finalmente se lleva a cabo- con un paro general de médicos de los hospitales y los centros de salud de todas las Islas el 6 de julio y continuará con 12 días de paros parciales en julio, que podrían continuar en agosto y septiembre.
«No queremos llegar a una convocatoria de huelga, queremos que se normalice la situación y la condición sine qua non para ello es que se vuelva a la normalidad de todos nuestros conceptos salariales del mes de mayo», afirmó ayer Isidro Torres, presidente del Simebal.
Por otra parte, el director general de Gestió Econòmica i Farmàcia y vicepresidente del IB-Salut, Martí Sansaloni, señaló ayer que el Ejecutivo autonómico «trabaja intensamente para encontrar un solución jurídica definitiva» al conflicto. Sansaloni aseguró a la agencia Efe que el Govern respeta la convocatoria de huelga de los médicos y agradeció la actitud «dialogante» que mantiene el Sindicato Médico. «Desde la máxima responsabilidad, trabajamos intensamente para encontrar una solución jurídicamente viable y por nosotros no quedará el intento de encontrar esta solución», puntualizó Sansaloni.