La patronal de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (PIMEM) aprobó ayer en junta directiva realizar un expediente de regulación de empleo (ERE) por motivos económicos, con el fin de reducir su estructura interna ante la falta de recursos para poder hacer frente a proyectos y estudios.
Las dos grandes asociaciones, que engloban a unos 1.800 socios, caso de Restauración y Pimeco, dentro de esta dinámica, mantienen una postura divergente con PIMEM. Mientras Restauración se ha puesto al corriente de los pagos pendientes, Pimeco sigue sin pagar su cuota como asociado a PIMEM, lo que afecta de manera muy especial a la tesorería de la patronal, que únicamente pueda recaudar vía cuota de socios unos 200.000 euros al año, cifra insuficiente para hacer frente al pago de la hipoteca bancaria y los gastos corrientes de explotación, entre ellos el de personal.
El ERE ha sido la opción elegida por los representantes de las diferentes asociaciones que componen la patronal, en total 67, aunque ayer no estuvieron todos presentes.
La falta de tesorería es el principal problema, que se suma a la congelación de todo tipo de convenios con el Govern.
Govern
PIMEM, que hasta hace un año formalizaba convenios y proyectos de formación con el Govern, en estos momentos, desde la llegada del PP al Consolat de Mar, tiene congelados todos los pagos pendientes por parte del Ejecutivo autonómico, agravando con ello su delicada situación financiera.
A partir de ahora, con una estructura mínima, casi de subsistencia, PIMEM tendrá que funcionar con otros criterios, mucho más ajustados a una situación de crisis económica, que está afectando de manera muy especial a las pequeñas y medianas empresas de Mallorca y resto de islas.