El PSIB ha acusado al PP «de haber cometido el mayor fraude electoral al imponer unos recortes que no habían incluido en su programa electoral» y ha advertido de que el Plan para el Equilibrio Económico supondrá «una bajada del 10% de los sueldos del personal sanitario, especialmente de médicos y enfermeras, además del despido de unas 2.000 personas».
En rueda de prensa, el portavoz adjunto de la formación, Vicenç Thomàs, ha afirmado que los recortes impuestos en la sanidad pública ponen de manifiesto que el objetivo del PP «es destruir día a día el Estado del Bienestar». Según ha indicado, el Plan hará que en Baleares «los ciudadanos no tengan una sanidad universal, gratuita y de calidad».
Para el socialista, los recortes dibujan «un escenario catastrófico para la sanidad pública». «El Gobierno ha decidido modificar la sanidad para hacer dos modelos: uno para aquellos que la pueden pagar y a los que están empujando a la privada» y otro para los demás, «a los que condenan a tener una sanidad de beneficencia».
En referencia a los hospitales comarcales de Inca y Manacor, Thomàs ha denunciado la «más que probable privatización» de estos dos centros y «la eliminación de la atención primaria». «La reducción de los horarios de atención ha sido el primer paso para esta eliminación», ha señalado Thomàs, quien ha advertido del «colapso» que sufrirán los servicios de urgencia de los hospitales.
Así, el secretario de Salud del PSIB-PSOE ha calificado de «improvisación absoluta y ocurrencia» las medidas incluidas en el plan de recortes y que afectan a la sanidad pública.