En el marco de las celebraciones del 50 aniversario de Mallorca Misionera, ayer tuvo lugar una jornada de homenaje a los misioneros mallorquines en el Seminari Nou.
Al encuentro asistieron el director nacional de Obras Misionales Pontificias, Anastasio Gil; el obispo de Huamachuco (Perú), Sebastià Ramis; y el obispo de Mallorca, Jesús Murgui.
El homenaje estuvo dirigido muy especialmente a las personas que durante estos 50 años han sido delegados de Misiones. Bartolomé Suau, Miquel Mulet, Jaime Mas, sor Antonia Sastre y José Estelrich.
En la actualidad hay 145 misioneros mallorquines repartidos por los cinco continentes, pero su presencia es especialmente importante en Perú y Burundi, países con los que la Diócesis de Mallorca mantiene un compromiso de especial atención material y espiritual, explicó ayer la actual delegada de misiones, Catalina Albertí.
Broche de oro
El broche de oro a las celebraciones del 50 aniversario de la fundación de Mallorca Misionera tendrá lugar el próximo 6 de mayo, Día de Mallorca Misionera.
Con motivo de la jornada, la catedral celebrará una misa solemne concelebrada por el obispo de Mallorca junto con el obispo de Gitega Burundi, Simón Ntamawata.