Históricos del PSIB, como Emilio Alonso o Josep Lluis Madico; ex cargos de anteriores gobiernos del Pacte, como el ex conseller Moragues, o directores generales y asesores, como Fernando Pozuelo, Andreu Carles, Carles Bona, Sarah Alonso o Sebastià Lora, y sindicalistas, como Lorenzo Bravo, han lanzado una corriente interna, Renovación Socialista, con la que quieren influir en los congresos del partido y abrir un debate sobre el nuevo rumbo que debe tomar el partido.
Ayer hicieron oír su voz en las distintas asambleas para elegir representantes y anunciaron que no es más que el principio del proceso.
Escándalo en Ponent
Un proceso que se inició con un hecho sin precedentes en la historia del partido: se suspendió la asamblea que debía celebrarse en la agrupación de Palma-Ponent, la más ‘antiarmengolista' de la capital balear y que antes fue un feudo del polémico Ramón Torres. Fuentes del partido hablan de ‘escándalo'. En esa asamblea se presentaban dos listas, una crítica. El presidente de la asamblea, antiarmengolista, la suspendió por defecto de forma. Ahora habrá que pedir autorización a Madrid para celebrarla. En Palma-Llevant, armengolistas y afines a Calvo se repartieron los puestos en una sola lista Los ‘renovadores', que también incluyeron a ‘calvistas', sacaron ventaja en Eixample. La ponencia política del PSOE de Palma reivindica la gestión de los socialistas y hace algunas consideraciones.
Así, señala que «el drama de nuestros éxitos es que la derecha los asume rápido como propios y la sociedad se olvida, cada vez con más rapidez, de quién los propuso o los consolidó».