Entre otros gastos fijos, el Govern debe destinar 14,5 millones de euros anuales al mantenimiento y conservación de la red de estaciones depuradoras de aguas residuales. Actualmente, existen 94 depuradoras en Balears, de la cuales, 56 funcionan en Mallorca.
Pero además de hacer frente cada año a los 14,5 millones que cuesta el mantenimiento y conservación de las estaciones de tratamiento de aguas residuales, es muy posible que la Agència Balear de l'Aigua i la Qualitat Ambiental (Abaqua) deba plantearse también en la presente legislatura la reforma o construcción de nuevas depuradoras, ya que se trata de unas obras civiles con una vida útil de aproximadamente 25 años y algunas de ellas iniciaron su actividad en 1989. La renovación de sus respectivos equipos electromecánicos también es constante, ya que cada 15 años requieren una sustitución de los mismos.
Dentro de las tareas para el correcto funcionamiento de una estación depuradora se distinguen los trabajos de funcionamiento y explotación, de mantenimiento y de conservación.
Los trabajos de mantenimiento son todos aquellos que permiten la producción de agua depurada: análisis del agua residual y depurada, control de la cantidad de lodos en proceso biológico y adaptación a los parámetros de las analíticas.
Por tareas de mantenimiento se entiende la revisión de la maquinaria. Y los de conservación corresponden a pintura y reparación de obra civil.