El gobierno en funciones de Aina Calvo tiene previsto aprobar hoy, en su última junta de gobierno, el remanente de tesorería del año 2010, que asciende a 20 millones de euros. De este modo, se confirman las denuncias del PP, que lleva tiempo diciendo que Calvo gastó el pasado año 20 millones de euros más de los previstos en el presupuesto.
No obstanate, el portavoz del PP y futuro teniente de alcalde d'Hisenda, Julio Martínez, se puso ayer en contacto con el secretario de la junta de gobierno para pedirle que se retire este punto del orden del día, ya que «un Ejecutivo en funciones no puede aprobar algo que vincule y limite al próximo gobierno». En este sentido, la Ley de Haciendas Locales, en su artículo 193, obliga al gobierno municipal a hacer una propuesta de financiación del déficit en el primer pleno que se celebre tras su aprobación en junta de gobierno; si se interpreta estrictamente sería el próximo sábado, en la constitución del Ajuntament. Si la reducción del gasto no resultase posible se podría acudir al concierto de operación de crédito. De no poder llevarse a cabo el presupuesto del ejercicio siguiente habrá de aprobarse con un superávit inicial de cuantía no inferior al déficit del año anterior.
Incumplimientos
El portavoz de los populares recriminó que «es la primera vez que un gobierno en funciones aprueba un remanente de tesorería». De este modo, además de suponer un incumplimiento de la Ley electoral (el gobierno en funciones sólo puede realizar trámites de administración ordinaria), se incumple también el artículo 193 de la Ley de Haciendas Locales, ya que establece que el remanente de tesorería debe estar aprobado; así como remitir una copia a la Administración del Estado y a la Comunidad Autónoma antes de que finalice el mes de marzo del ejercicio siguiente al que corresponda. Martínez reiteró que Calvo debería haber aprobado este asunto antes de las elecciones; pero ya que no lo ha hecho la insta a no aprobarlo hoy para «no comprometer ni limitar» al próximo gobierno municipal. En su opinión, si el gobierno en funciones aprueba hoy el remanente de tesorería será una «falta de lealtad». Además, calificó de «poco ético haber ocultado esta información a los ciudadanos antes de las elecciones del pasado 22 de mayo».