Cuando termina una legislatura es el momento de hacer balance de las actuaciones que se han materializado, pero también de aquellas que no se han puesto en marcha, algunas pendientes desde hace varios mandatos.
La crisis económica y la situación de inferioridad en la que ha gobernado el equipo de gobierno de Aina Calvo en el Ajuntament de Palma son los dos principales motivos por los que no se han ejecutado muchos proyectos; algunos de los cuales también dependen de otras instituciones.
Entre los más destacados se encuentra la incorporación del canódromo a la falça verda. La crisis económica ha impedido culminar este proyecto. Sí se podría haber mejorado el parque de Sa Riera, infraestructura que ha permanecido en el olvido, siendo la falta de seguridad una de sus principales deficiencias. La degradación del Lluís Sitjar ha ido a más y, aunque ha ordenado su demolición tras ser declarado en estado de ruina, aún no se ha intervenido.
La incapacidad de reformar Son Moix en casi cuatro años ha sido uno de los principales errores del gobierno de Calvo, por el que ha pedido disculpas. Las mejoras en Cala Major y Sant Agustín tampoco se han llevado a cabo, ya que el PERI redactado por el gobierno de Catalina Cirer se suspendió y aún no se ha redactado uno nuevo; no se ha pasado de la fase de estudios.
Otro de los proyectos que ha quedado en el aire es la reforma de la Platja de Palma. Pese a tener financiación estatal, el plan fue retirado por la falta de consenso con vecinos y empresarios. El edificio Gesa lleva casi tres años vacío y aunque se ha presentado un plan de usos, no se ha ejecutado.
Entre los temas históricos destaca Son Busquets, que lleva más de 13 años en espera de que el Ministerio de Defensa impulse la construcción de viviendas, tal y como acordó con el Ajuntament de Palma. Otro tema estancado es la antigua cárcel provincial de Palma. El Ministerio del Interior y Cort permutaron estos terrenos, propiedad del primero, por los solares que acogen actualmente la cárcel de Unidad de Madres. Sin embargo, el Ajuntament aún no tiene la antigua prisión.
Otros temas que también han quedado pendientes esta legislatura son la mejora de los accesos, las obras del Palacio de Congresos y la fachada marítima, que tendrían que haber finalizado esta legislatura.
El futuro gobierno de Cort tendrá que decidir qué hace con estos proyectos.