Quince centros educativos de primera y secundaria forman parte de una experiencia piloto que modifica su relación con la Conselleria de Educación mediante la firma de contratos-programa en los que se comprometen a mejorar los índices de éxito escolar de sus alumnos en un plazo de tres cursos.
Los contratos-programa suponen que la relación entre cada centro y la Administración es individualizada y se basa en un análisis previo de sus necesidades y su realidad y la aplicación de soluciones específicas, según ha explicado la Conselleria en un comunicado.
Participan en la experiencia siete centros de Mallorca, los cinco de Formentera, dos de Ibiza y uno de Menorca, para los que se ha diseñado un plan global de mejora que da coherencia y coordina todas las actuaciones y los proyectos que desarrollarán, después de que se hayan definido los objetivos y las estrategias necesarias para los próximos tres cursos, hasta 2014.
El documento, además, incluye actuaciones para fomentar la participación efectiva de todos los sectores de la comunidad educativa, especialmente de las familias del alumnado.
El conseller de Educación y Cultura, Bartomeu Llinas, ha incidido en que los contratos programa inauguran una nueva línea de relación de la Administración con los centros que permite un tratamiento más individualizado y tener en cuenta las características especificidades de cada uno.
En los contratos-programa para el éxito escolar, el centro se compromete a incrementar el éxito escolar de sus alumnos y la Administración da más autonomía a los centros y facilita los recursos y los apoyos necesarios para gestionar sus planes.
La Conselleria asesorará en el proceso de elaboración, aplicación y evaluación de los planes de cada centro, les asignará una aportación económica en función del proyecto presentado, organizará la formación del profesorado y de las familias que sea necesaria y facilitará que el centro pueda solicitar algunas plazas de profesorado con perfil específico.
También se favorecerá la cooperación y el intercambio entre los centros que participan en el programa.
El principal objetivo de los contratos-programa es mejorar el rendimiento escolar de los alumnos, que se determinará midiendo el grado de desarrollo o adquisición de las competencias básicas, la reducción del número de repetidores, y la mejora de los índices de promoción.
También buscan mejorar la cohesión social en el centro y de este con la comunidad educativa y con el entorno, como requisito indispensable para combatir el fracaso escolar, así como favorecer la reducción de la tasa de abandono escolar temprano, en el caso de la educación secundaria.
Los aspectos que más potenciarán los centros serán la lectura y el trabajo de las competencias básicas, así como la implicación de las familias en el desarrollo de la comprensión lectora, los hábitos de lectura y de las competencias básicas de sus hijos, y la formación del profesorado implicado.
La evaluación la harán al principio los centros y a partir del segundo año también la Administración que medirá la evolución de los resultados académicos de los alumnos, la proporción de alumnado que obtiene buenos resultados y de titulados en secundaria, la tasa de abandono y el grado de implicación de las familias.
Los primeros centros que participan en la experiencia son, en Mallorca los colegios Alexandre Rosselló, Miquel Duran y Saurina, Gabriel Vallseca, San Buenaventura y San Felipe Neri y los institutos Ses Estacions y Puig de Sa Font; en Menorca el colegio Angel Ruiz y Pablo; en Ibiza el colegio Sa Graduada y el instituto Santa María.
Dentro de este primera experiencia hay una modalidad de plan de mejora de zona, que se aplica en la isla de Formentera, dado que tiene un solo instituto. En este caso participarán los 5 centros educativos: los colegios El Pilar, Mestre Luis Andreu, San Ferran de Ses Roques y Virgen Milagrosa y el IES Marc Ferrer.