El Ajuntament de Palma no podrá revocar la medalla de oro al dictador Francisco Franco, ni anular los acuerdos políticos adoptados durante el franquismo, ya que no se puede realizar un acto administrativo sino que tiene que ser político. Así, la medalla de oro quedará sin efecto y los acuerdos de pleno serán declarados ilegítimos. La regidora de Cultura i Patrimoni, Nanda Ramon, adelantó que adaptarán la proposición a la recomendación de los servicios jurídicos y puntualizó que se trata de «tecnicismos jurídicos». No obstante, subrayó que «el contenido es el mismo». Así, destacó que «Franco no será medalla de oro de Ciutat porque habrá quedado sin efecto».
«Chapuza»
Sin embargo, para el portavoz del PP en Cort, Julio Martínez, el informe de los servicios jurídicos «reconoce que lo que quería hacer el equipo de gobierno era una chapuza administrativa y al final quedará como una propuesta política». Martínez advirtió que si hubiesen modificado el reglamento de condecoraciones y distinciones, como pedía el PP, «el acuerdo habría sido de revocación y anulación».
El portavoz de los populares no quiso adelantar el sentido del voto de su grupo, aunque sí dejó claro para «el PP no es una prioridad y no queremos ser cómplices de un engaño a los ciudadanos». Para Martínez el único fin de presentar esta propuesta antes de las elecciones es «electoralista» y acusó al equipo de gobierno de «romper el espíritu de la transición». Además, reprochó que «un gobierno que no tiene legitimidad democrática proponga dejar sin efecto una medalla de oro».
Sea cual sea el sentido del voto del PP, la medalla de oro de Franco quedará sin efecto y los acuerdos de pleno serán declarados ilegítimos, ya que UM votará a favor de la propuesta, según adelantó ayer el presidente de los uemitas en Palma, Marc González. Además, expresó su deseo de que esta propuesta sea aprobada con el mayor consenso posible, ya que se trata de condenar una dictadura.