Una mayoría de ingenieros del propio Departament de Carreteres del Consell no suscriben el proyecto de vía conectora que presentó el organismo insular el pasado mes de enero. El malestar, según ha podido saber este diario, es generalizado entre los técnicos que ni han participado en la confección de los proyectos ni tampoco están de acuerdo con los criterios que se han empleado para diseñar la autovía.
Tal es la indignación que los ingenieros ya se han entrevistado con el conseller de Presidència del Consell, Cosme Bonet, a quien le han puesto de manifiesto que, a su juicio, el proyecto no cumple el Plan Sectorial de Carreteteras aprobado en el año 2009 en cuanto a lo que debe ser una carretera desdoblada.
Desdoblamiento
Entienden, como dice el texto del plan, que una carretera convencional de doble calzada es una carretera desdoblada «sin las características de una autovía o autopista». Además opinan que los pasos deben ser a nivel, alguno por lo menos, según estipula el propio plan.
«No suscribimos el proyecto y especialmente el enlace de la carretera de Sóller, que es una aberración», afirman. También exigen que los proyectos pasen por la Comissió de Medi Ambient.