El precio medio de la vivienda nueva en Palma ha disminuido un 4,6% en 2010, hasta situarse en los 2.176 euros por metros cuadrados, un coste que la mantiene como la ciudad más cara de Baleares y coloca a la comunidad como la región en la que más han subido los precios en la última década (8,4%).
Así lo recoge el Boletín de Mercado de Vivienda Nueva de 2010, elaborado por la Sociedad de Tasación con datos de vivienda libre en las capitales de provincia y poblaciones de más de 25.000 habitantes, informe en el que se señala que los precios también han bajado en Ibiza (-3%) y Calvia (-2,1%) en el último año.
Manacor, con un incremento del 0,6%, es una de las pocas localidades españolas en las que el precio subió durante el pasado año.
Palma (2.176 euros/m2) e Ibiza (2.101 euros/m2) son las localidades con el metro cuadrado construido más caro de la comunidad; mientras que, en Calvia, el metro cuadrado construido se sitúa en los 2.062 euros y en Manacor en los 1.559 euros.
Con estos precios, las principales poblaciones de las islas se mantienen por debajo de la media nacional, que se situó el pasado año en 2.476 euros, cifra sostenida por los elevados costes de la vivienda en comunidades como Madrid, Cataluña y el País Vascos, que son las únicas tres comunidades que superan la media.
Palma, y por extensión Baleares, es además la tercera que más ha bajado su precio medio, solo por detrás de Aragón (-5,8) y Extremadura (-5,2), muy por encima de la bajada media del conjunto del Estado (-3,2).
Las previsiones del informe de Sociedad de Tasación apuntan a que en el año 2011 los precios seguirán una evolución negativa, una tendencia que también se notará en la demanda, que continuará bajando y la venta de «stock» se mantendrá lenta.
La oferta de vivienda nueva seguirá siendo «importante» sobre todo por el considerable «stock» existente y que tiene colocación «muy lenta"; si bien este tipo de oferta «será menos abundante en las zonas céntricas de las ciudades por la escasez de inmuebles nuevos ya construidos y de suelo edificable».
«Es de prever que, como mínimo, en la primera parte del año las ventas tiendan a ralentizarse, y se mantenga la tendencia de crecimiento negativo en los precios hasta que se absorba el excedente de oferta existente», detalla el informe, que concreta que este crecimiento negativo se podrá producir tanto en las primeras residencias como en las segundas viviendas y en las turísticas.
Asimismo advierte de que el incremento de los costes financieros rebajará los márgenes comerciales de las promotoras, lo que podría prolongar el período de reducción de inversión en el mercado inmobiliario.
De este modo, el informe considera que en 2011 «es previsible» que se mantenga el ajuste de la oferta iniciado al final de 2008 para adecuarse a un volumen de demanda inferior, al que se suma la desaparición a final de 2010 del incentivo fiscal para la adquisición de vivienda.