El incremento del turismo alemán durante estos meses de temporada baja, principalmente en las últimas tres semanas, ha propiciado que muchos hoteles hayan optado por aplazar su cierre, circunstancia que es valorada de forma muy positiva por la Federación Hotelera de Mallorca, «ya que ello incide en materia laboral, económica y la propia dinamización de las zonas turísticas, pero la oferta complementaria y de restauración también debería actuar del mismo modo», coinciden en señalar la presidenta de la Federación Hotelera de Mallorca (FEHM), Marilén Pol, y el presidente de la Asociación Hotelera de la Platja de Palma, Francisco Marín.
En el gráfico adjunto se puede ver la planta hotelera que estará abierta este invierno en la Isla, el 22% de media entre noviembre y abril. Para Marín, «en la Platja de Palma y en Peguera hemos notado el impacto del alza del turismo alemán. Tanto es así, que hoteles que tenían pensado cerrar el 30 de septiembre, han aplazado el cierre hasta el 20 de este mes y algunos de ellos hasta pasado el puente del 1 de noviembre. Se ha ganado casi un mes. Pero esto no es todo, ya que hay hoteles que han apostado por tener abierto el establecimiento durante todo el invierno».
La FEHM puntualiza que el invierno 2010-2011, «será mejor en cuanto a cifra de visitantes y ocupación hotelera que el pasado año, pero hay que seguir trabajando. De momento, la planta hotelera abierta se comercializa a 20 euros/día en régimen de media pensión. Necesitamos posicionarnos como destino de invierno y consolidar los productos de senderismo, golf o cicloturismo. Se ha mejorado algo, pero queda mucho camino por recorrer».