El ex director de Antena de IB3 Televisió, Arturo Orrico, quien ha prestado declaración como imputado dentro de una pieza separada del caso Palma Arena, ha negado de forma tajante ante el juez José Castro haber cobrado comisión alguna durante su etapa como directivo de la cadena a cambio de la contratación de empresas vinculadas al empresario televisivo José Luis Moreno para la producción de programas y la instalación de decorados en el Ente autonómico.
Durante una comparecencia que se ha prolongado durante tres horas ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3, el fiscal Pedro Horrach y los letrados personados en la pieza número 1 del caso, el encausado ha aseverado que «ni tan siquiera» se le ofrecieron para entregarle dádivas como tampoco sabe que «otros las hayan cobrado», en contra de las pesquisas llevadas a cabo sobre el presunto fraude cometido en torno a estas adjudicaciones durante la pasada legislatura.
Es más, Orrico, asistido por el letrado valenciano Pío Vicente García, ha asegurado que durante su etapa como director de Antena entre octubre de 2004 y julio de 2007, se hicieron unos cuarenta decorados, de los que «sólo dos» corrieron a cargo de Moreno, mientras que, de la misma forma, se realizaron unos cuarenta programas y también dos de ellos los hizo el conocido productor. «No es cierto que Moreno ganara todos los concursos», ha subrayado.
Sin embargo, en una extensa declaración en la que fue interrogado de forma pormenorizada acerca de los contratos rubricados para la producción de distintos espacios y la elaboración de decorados, Orrico ha reconocido que en una ocasión, en 2006, fue invitado por Moreno a pasar un par de horas en un barco que tenía fondeado en el Port d'Andratx «junto con la hermana del productor y su sobrina» y únicamente él por parte de IB3, aunque ha asegurado que tras esta visita ninguna de las empresas de Moreno fue destinataria de nuevas contrataciones.
En esta misma línea, ha recordado que en otra ocasión se desplazó a Madrid junto a Umbert en el 'jet' privado de Moreno tras la invitación de éste, puntualizando que el viaje «no fue ningún secreto y todos los de mi círculo de IB3 lo sabían».
Orrico ha recordado que fue en marzo de 2005 cuando la entonces directora general del Ente, María Umbert -imputada en esta pieza- le presentó a Moreno de forma «sorpresiva y protocolaria», durante un encuentro en el que no se habló «para nada» de ninguna colaboración entre las empresas del productor e IB3 sino «más bien de cotilleos televisivos».
Preguntado ya sobre la elaboración de los decorados de los informativos, ha explicado que debido a su elevada cuantía resultaba exigible la convocatoria de un concurso con plazos límite de entrega, recordando que entre las siete solicitudes de oferta que se cursaron se encontraba una de Moreno, a quien no conocía por entonces. Sin embargo, ha negado ser él quien decidió convocar a las empresas del conocido ventrílocuo, ya que «no intervenía» en este proceso.
«No tenía ninguna capacidad de contratación»
«Resulta difícil creer que en la primera reunión se hablara de cotilleos televisivos y no de los decorados, cuando era un tema pendiente de resolverse», le ha significado en ese momento el magistrado, quien ha inquirido además al imputado sobre si invitó al productor madrileño a participar días después de cerrarse el concurso haciéndole llegar la oferta más barata para que él la mejorase, lo que Orrico ha tildado de «categóricamente falso», ya que carecía de capacidad de contratación.
En el caso de los decorados de programas, ha señalado que su encargo no se hacía mediante concurso sino que en cada ocasión se elegía a la empresa que consideraban más adecuada. «Lo importante es que los decorados se hicieran bien y pronto», ha justificado Orrico. Tal y como ha recalcado, el decorado de 'Bona nit Balears' fue uno de los que se encargaron a Moreno aunque fue entregado con «deficiencias que imposibilitaban su uso», por lo que fue contratada otra empresa a fin de instalar un nuevo decorado.
Pasado un tiempo fue cuando, ha apuntado, Umbert le comunicó que Moreno insistía en cobrar la factura por el decorado que había realizado su empresa, ya que de lo contrario iniciaría acciones legales. Ello pese a que, según ha relatado, en un principio se opuso a que se denegara el pago ya que los únicos arreglos que volvían a facturarse no eran los derivados de deficiencias sino de acomodación del decorado a las temporadas del año y que se encargaban a la misma empresa que había hecho el inicial.
Finalmente, el encausado, ha indicado que tras cesar como director de Antena creó la empresa Vértigo Consulting, sobre lo cual ha recordado que el primer encargo que recibió -una rejilla de programación por importe de 12.000 euros- fue de parte del sucesor de Umbert como director general, Antoni Martorell. No obstante, ha matizado que «ni directa ni indirectamente» ha participado en ningún concurso durante la etapa de Martorell, como tampoco mantiene vinculación alguna con las empresas de José Luis Moreno.
Su comparecencia ha tenido lugar así dentro de una de las 25 piezas en las que el magistrado acordó dividir el caso para agilizar la instrucción de una compleja causa que en líneas generales investiga el presunto desvío de más de cincuenta millones de euros durante la construcción del velódromo Palma Arena, su posible conexión con el enriquecimiento supuestamente ilícito de Matas durante su etapa como presidente del Govern, y la presunta financiación irregular del PP en las elecciones autonómicas de 2007.
Cabe recordar que el ex directivo de una de las productoras de Moreno, Luis Velasco, ya acusó al empresario madrileño de haber entregado al ex presidente del Govern, Jaume Matas, un sobre con 250.000 euros en efectivo durante la gala inaugural de IB3 Televisió celebrada el 4 de septiembre de 2005 en el Casino de Mallorca, que habría servido como contraprestación por los favores realizados con la concesión de programas a sus empresas.
Se trata de unos hechos que se convirtieron en una de las principales líneas de investigación dentro de las diligencias informativas que incoó la Fiscalía y que vinculan al ex presidente con el cobro de sobornos por parte del ente autonómico durante la pasada legislatura. Abierta a finales de 2008, las pesquisas de la que se denominó Operación Cámara constituyen en la actualidad una pieza separada del caso Palma Arena después de que el Ministerio Público las remitiese al Juzgado para que prosiguiese con ellas.