Los vecinos de Can Pastilla se han mostrado «agradecidos» a todos los partidos políticos y al presidente del Govern, Francesc Antich, tras haberles garantizado que no se van a derribar ni expropiar las 91 viviendas de Can Pastilla y las Maravillas, aunque han remarcado que desearían que se les hubiese «dado la razón desde el punto de vista urbanístico».
Después de haber mantenido un encuentro con la gerente del Consorcio para la reconversión de la Playa de Palma, Margarita Nájera, y con el defensor de la Ciudadanía, Miquel Lladó, en declaraciones a Europa Press, el portavoz de la plataforma vecinal, Antoni Martínez, ha indicado que en la reunión, prevista desde principios de mes, los residentes en la zona afectada por la reforma han defendido la necesidad de que «de cara al futuro, se atengan al Plan Director».
Según ha explicado, los vecinos han remarcado que quieren un «proyecto a escala humana y que busque la proporción». El bulevar que estaba previsto en la zona, según consideran, sólo tenía sentido si era para «escalas grandes».
Por su parte, en declaraciones a Europa Press, Nájera ha opinado que el encuentro ha ido «bien» y ha servido para «intercambiar opiniones» con los residentes, así como para «clarificar» algunas informaciones.
Asimismo, se ha explicado que el proyecto se basa en «humanizar las calles y en atender» a los vecinos puesto que las vías cuentan con un diseño de «hace muchos años», así como con un problema de escasez de zonas verdes.