La alcaldesa de Palma, Aina Calvo, ha prometido hoy que se mantendrán los precios y tasas municipales y ha anunciado que el Ayuntamiento comenzará en septiembre la revisión del plan general de la ciudad, doce años después de su última modificación, para introducir criterios de sostenibilidad.
En su intervención en el debate del estado de la ciudad, Calvo ha asegurado que la revisión del plan general de la ciudad planificará más y mejor dotación de equipamientos de cara al futuro, la preservación del paisaje, tendrá en cuenta los espacios urbanos olvidados y mejorará la forma de crecer, si es necesario crecer, ha puntualizado.
En relación a los impuestos municipales, Calvo se ha comprometido a mantener «todos los precios y tasas públicas». «Por lo que depende de este Ayuntamiento nadie pagará más el año que viene ni por el IBI ni por ninguna otra tasa o servicio municipal», ha prometido.
Ruptura
La alcaldesa se ha referido a la ruptura del pacto de gobernabilidad en el Ayuntamiento, con la expulsión de Unió Mallorquina el pasado febrero, una decisión que ha calificado de «inevitable», y ha asegurado que el actual gobierno municipal es «vulnerable, pero no débil».
Según Calvo, ni la ruptura política ni la crisis económica han paralizado la actuación del consistorio. «Teníamos que elegir entre la esperanza de intentar cambiar el orden de las cosas y el miedo alimentado por aquellos que prefieren que no cambie nada. Elegimos la esperanza y, créanme, ha valido la pena», ha afirmado sobre la ruptura que dejó el gobierno en manos del PSIB y el Bloc per Palma.
Sobre la actuación del Ayuntamiento, Calvo ha subrayado que ya han comenzado «las obras de mejora de los accesos a Palma» y ha destacado como prioridad la necesidad de «reducir los 800.000 desplazamientos diarios en coche particular».
Ha pedido disculpas por no haber podido solucionar antes la situación del polideportivo de Son Moix, un retraso que ha atribuido a la dificultad para obtener financiación. «Las obras se harán, pero llegarán tarde en comparación con las molestias de tres años que no se verán compensadas», ha asegurado.
Logros
Entre los logros ha destacado que el Ayuntamiento ha incrementado las ayudas de emergencia a personas con necesidades en un 47%, ha abierto nueve centros de día para mayores y tres guarderías y ha comenzado la rehabilitación de Camp Redó conocido como el barrio de Corea.
Calvo ha asegurado que el consistorio ha preparado la ciudad para el cambio climático con obras de recogida de pluviales y ha destacado la plantación de árboles, la instalación de contenedores soterrados, la mejora del alumbrado y la incorporación de nuevos agentes a la unidad de Policía Nocturna. También se ha instalado alumbrado en Son Roca y se ha abierto la biblioteca de S'Escorxador.
De cara al futuro ha señalado que las obras del Palacio de Congresos «avanzan a buen ritmo», ha anticipado la dotación de servicios a la urbanización de Bellavista.
Ha señalado que, del mismo modo que el eje cívico de Blanquerna «ha vencido los peores augurios», también el que está previsto ejecutar en Santa Catalina «superará los temores iniciales cuando se finalice».
Otros compromisos que empezarán a ejecutarse este año, según Calvo, son «un gran parque verde en primera línea, el Corredor del Mar», enmarcado en el proyecto de la Fachada Marítima, y el eje del Parc de les Vies que se ampliará también a corredor verde.
Numerosas autoridades han asistido a la apertura del debate del estado de la ciudad, entre las cuales estaban las presidentas del Parlament, Aina Rado, y el Consell de Mallorca, Francina Armengol.
Propuesta
El teniente de alcaldesa y concejal de Benestar Social, Treball, Cultura i Participació Ciutadana, Eberhard Grosske, ha propuesto hoy que Cort adopte medidas salariales o de conciliación para contrarrestar los efectos del recorte de sueldos que afecta a los empleados municipales.
En su intervención durante el debate del estado de la ciudad, como portavoz del grupo del Bloc per Palma, Grosske ha anunciado que planteará la adopción de medidas para ayudar a los trabajadores públicos del Ayuntamiento a afrontar los recortes salariales impuestos por el decreto del Gobierno central.
El objetivo de dichas iniciativas, según Grosske, sería «intentar vía salario indirecto o conciliación, menguar la agresión que han sufrido injustamente».