La alcaldesa de Palma, Aina Calvo, aseguró ayer que gobernará en minoría «aunque sea difícil y requiera mucho coraje», pero ha prometido que Palma «no quedará paralizada» de ninguna manera y agotará los plazos de negociación con el resto de grupos políticos en Cort para sacar adelante sus propuestas.
Son las primeras declaraciones de Aina Calvo tras tomar la decisión de cesar a los regidores de UM Cristina Cerdó y Baldomero Oliver, basándose en una «pérdida de confianza», por lo que, a partir de ahora, gobernará en minoría con el Bloc.
A los ceses de Cristina Cerdó como primera teniente de alcaldesa y regidora de Medi Ambient, Economia i Treball, y Baldomero Oliver como regidor de Esport i Joventut, se unen también los de todos los cargos de confianza de UM.
Tras conocer la detención de Miquel Nadal y cesar a los regidores de UM, Calvo señaló que todos los procedimientos judiciales que afectan a Unió Mallorquina crean «sombras de duda» sobre la gestión de esta formación en el Ajuntament, por lo que anunció que se llevará a cabo una investigación de todas las empresas públicas y organismos asociados a esta formación en el Consistorio.
Remodelación
Calvo señaló que espera anunciar el lunes la reestructuración del Gobierno municipal pero adelantó que el socialista José Hila pasa a ser primer teniente de alcaldesa. Además, anunció que espera reducir departamentos y cargos del Consistorio, respondiendo a los «criterios de austeridad que reclaman los tiempos que corren».
La primera edil se refirió al futuro en Cort y admitió que «no será fácil» gobernar en minoría con el Bloc, aunque recordó que el Ajuntament de Palma «no será ni el primero ni el último del Estado» que no gobierne con una mayoría. Aseguró que el equipo de Gobierno de Cort dedicará «todos sus esfuerzos» a continuar trabajando para hacer realidad el «modelo de ciudad mejor que proponemos, basado en el compromiso, la transparencia y el interés general», agregó.