Un grupo de agricultores asociados a Unió de Pagesos vendió ayer por la mañana naranjas y hortalizas al precio que cobra el agricultores, ante la sorpresa de los viandantes, como medida de protesta ante los bajos precios que éstos perciben y la revalorización que estos productos sufren cuando llegan al consumidor.
«Los precios de los productos agrícolas caen pero los consumidores no lo notan», denuncian los payeses que atribuyen esta situación a los elevados márgenes de los intermediarios y vendedores finales.
En concreto, Unió de Pagesos afirma que la diferencia de los precios del campo a la mesa es del 537 por ciento, una situación que califican de «escandalosa» y que pone en peligro la viabilidad de muchas explotaciones agrícolas y ganaderas de las Islas.
Como se recordará, el sindicato agrario realizó hace unas semanas un protesta similar en la que vendieron melones y almendras a precios de origen para denunciar la situación de crisis que atraviesan las explotaciones agrícolas y ganaderas de las Islas.