«Éste es un planteamiento que no es lógico, ni entiendo; sinceramente no entiendo nada».
Así respondía el president Antich a la propuesta del Bloc, anticipada ayer por este diario, de unir el debate de la futura Ley del suelo con la aprobación de la Ley del sector público que el president considera imprescindible para evitar casos de corrupción. Antich recordó que el proyecto del ley del suelo aún no tiene el acuerdo de los partidos ni de los diferentes sectores.
La de ayer, fue la segunda advertencia del president a sus socios en pocos días. De hecho, y según ha sabido Ultima Hora, hay un debate abierto en diferentes niveles del partido sobre si habría que prescindir el Bloc en el Govern. Otros sectores son partidarios de romper con UM. Antich no tomará ninguna decisión inmediata: ahora le preocupa la aprobación de los presupuestos, dijeron a este diario.
El Bloc, a través de uno de sus diputados, explicó que el PSIB parece haber llegado a un 'pacto oculto' con UM, en alusión a los acordado en el Consolat para que volvieran los 'uemitas' al gobierno insular, y que se están viendo algunos síntomas de «deslealtad».
Lo que el Bloc propone es una negociación conjunta de varias cuestiones que afectan al Govern pero también al Consell, como el plan de carreteras, la ley del suelo, la reforma del reglamento del Parlamanet para sustituir a cargos imputados y el plan territorial. El citado diputado del Bloc se mostró muy quejoso con lo que pasa en Campos. Exigió que se aplicara la teoría del 'esponjamiento' y que si crecía la edificación en Campos, como alternativa al golf de Son Baco, se eliminaran de otras zonas. Hoy se reúne el pleno del Consell y del orden del día se han eliminado todos los asuntos polémicos, como las carreteras.