La Conselleria d´Afers Socials, Promoció i Immigració destinará el año próximo el 65 por ciento de su presupuesto al desarrollo de la Ley de Dependencia. De un total de 120.763.000 euros de presupuesto, casi 79 millones servirán para atender las demandas de ayudas y prestaciones que esta ley ofrece, una cantidad que suponen doce millones de euros más que en el año en curso.
Una vez decidido y asumido que este departamento -como todos los demás- verá reducido el dinero con que contará en 2010, en su caso en un 2,70% (es la Conselleria que menos baja), los responsables han optado por apostar al máximo por la atención a la dependencia, que será el área prioritaria junto a la de la protección del menor, que dispondrá de 8.823.000 euros.
La consellera d´Afers Socials, Josefina Santiago, reconoció que «cuando ha habido crecimiento económico, como en 2008 y 2009, el presupuesto de esta Conselleria ha sido de los que más ha subido, un 11% y un 13% respectivamente, pero en estos momentos de crisis es la que menos baja y esto demuestra la apuesta clara del Govern por los servicios sociales, porque entendemos que éstos están en crecimiento».
Cooperación pierde
En consecuencia, otras áreas verán reducida su capacidad de actuación. Eso será así sobre todo para la Direccio General de Cooperació, que pierde cerca de 6 millones de euros, al pasar de 16 millones este año a los 10,4 millones de 2010. Santiago explicó que «bajarán algo todas sus partidas, sobre todo la referida al gasto corriente, pero también comunicación, viajes, programas de sensibilización propios, a fin de que el recorte afecte lo menos posible a los proyectos de cooperación que realizan las ONG».
La consellera aseveró, además, que el recorte presupuestario no afectará a prestaciones tan importantes para muchas personas como la Tarjeta Básica o la Renta Mínima de Inserción, «es decir, que todo lo que representa garantizar ingresos económicos a las familias, más aún en estos momentos difíciles, se preservará, será también prioritario para nosotros». El futuro de otras ayudas está aún en estudio, como la que se concede a través del denominado cheque bebé.
Garantía de atención
Santiago reconoció que el dinero que se destinará en 2010 a la Ley de Dependencia «garantizará» la atención, si bien no descartó la posibilidad de poder ampliar la partida en el transcurso del año, por ser éste uno de los pocos presupuestos revisables», porque, explicó, «nuestras previsiones se basan en que el número de solicitudes de ayuda es de menos de 400 al mes, pero lo cierto es que actualmente se mantienen por encima de las 450 mensuales». En cuanto al porcentaje que aporta el Estado a estas ayudas, Santiago lamentó que sigue siendo el mismo que en los últimos años «y no llega al 33% del total al que se comprometió, lo que para las comunidades empieza a ser inasumible».
Santiago no escondió, por último, que «van a ser un presupuestos de muy mala gestión para todas las Consellerias».