La Conselleria de Medi Ambient ha detectado pérdidas de 33 millones de metros cúbicos de agua potable en las redes de las Islas, con datos del año 2006. Esto supone un 23 por ciento del total del agua potable consumida, que exactamente son 140.000 millones de metros cúbicos anuales. «El agua es un bien escaso y en Balears es bien caro de producir y tiene un coste ambiental elevado», señaló el conseller de Medi Ambient, Miquel Àngel Grimalt. Además, añadió que la cantidad que se pierde equivale a «cinco veces el Gorg Blau lleno» y destacó que si esto no sucediese «los problemas de agua estarían muy resueltos».
Por Islas, Mallorca recibe en sus redes 115'5 millones de metros cúbicos, de los cuales se pierden 26'3 millones aproximadamente; lo que supone un 23 por ciento. Menorca recibe 14'1 millones de metros cúbicos, de los que se pierden 3 millones, es decir, el 22 por ciento. Por su parte, Eivissa recibe 14'5 millones de metros cúbicos, de los que se pierden 3'4 millones; lo que representa el 23 por ciento. Formentera es la Isla en la que existe una diferencia menor entre el agua extraída de los distintos puntos de suministro y el que finalmente se factura; exactamente el 11 por ciento. Así, de los 548.000 metros cúbicos de agua que recibe, se pierden 60.000.
Para evitar que esto suceda, la Conselleria de Medi Ambient destinará más de 2'5 millones de euros en una primera convocatoria, tanto para detectar las fugas mediantes unos dispositivos, como para solventarlas. El director general de Recursos Hídrics, Isidre Canyelles, puntualizó que de la segunda convocatoria de ayudas sólo se podrán beneficiar los municipios que hayan introducido los elementos de diagnóstico. Grimalt destacó que los monitores con los que se realizará el diagnóstico serán fijos y permitirán hacer las detecciones de fuga mucho más rápido».