El próximo curso escolar, que empieza el viernes, será el definitivo de cara a lograr la educación digital, al menos en los centros públicos, siempre y cuando la Conselleria d´Educació pueda contar con el presupuesto suficiente, algo que no está garantizado. Existe la promesa de la Conselleria, y por tanto del Govern, de que a través del Plan EducaTic antes de finalizar el año todos los colegios e institutos públicos cuenten con conexión Wi-Fi a internet -actualmente hay unos 60 que aún no la tienen-, de forma que en mayo de 2011 se pueda haber cumplido el objetivo de que todas las aulas de los centros públicos cuenten con pizarras digitales y dispongan de ordenadores para el alumnado y el profesorado. Nada se dice de la escuela concertada.
El reto para esa fecha es haber reducido la ratio a un ordenador por cada cuatro alumnos de centros públicos, cuando ahora se sitúa en un ordenador por cada 12 ó 14 alumnos, según los centros.
Por tanto, que nadie piense que en las Islas habrá un ordenador por alumno como prometió el presidente Zapatero mediante la aplicación del Plan Escuela 2.0. Esa ratio no se logrará este curso y la consellera balear, Bàrbara Galmés, ya dijo que los ordenadores portátiles que lleguen no serían necesariamente para los alumnos de 5º de Primaria.
Y es que, explicó Galmés, esta medida será una más, compatible con las que contempla el Plan EducaTic del Govern, que debe contar, salvo imprevistos, con una dotación presupuestaria de 27 millones de euros aportados por el Gobierno. De hecho, para este curso 2009-10 tan sólo está previsto que tengan, a lo largo del año escolar, un ordenador portátil todos los alumnos de 5º de Primaria de cinco centros piloto: dos de ellos de Palma y uno de cada una de las islas menores.
Pero todos estos planes dependen, en última instancia, de la dotación presupuestaria que reciba la Conselleria d´Educació de cara al próximo año del Govern y del dinero que llegue de Madrid, aunque desde este Departamento se confía en poder cumplir su desarrollo.
El objetivo es que este curso sea el verdadero punto de inflexión de cara a la implantación de la educación digital en las Islas. En este sentido, las Islas se encuentran en una posición intermedia con respecto al conjunto del Estado, pues si bien no somos los mejor situados en cuanto a digitalización de las aulas y número de ordenadores por alumno, como sí lo está, por ejemplo, Extremadura; tampoco formamos parte del grupo de autonomías que, por no tener, no tienen ni plazos definidos para la dotación de este material informático, caso de Madrid.
Otro aspecto a tener en cuenta es que todavía no está determinado del todo el coste que supondrá para las familias. Por lo pronto, parece ser que el plan del Gobierno central contempla que los padres de los escolares abonen el 50% de ese ordenador.