La magia del cabaret ha brillado este fin de semana en Mallorca de la mano del legendario Moulin Rouge. Sus bailarinas han traído desde París su arte interpretativo y lujo de vestuarios al escenario del hotel Blau Porto Petro, para ofrecer dos interpretaciones que han culminado con el mítico can-can de La Quadrille.
Un combinado de música, belleza y baile, inmortalizado en la obra pictórica de Toulouse-Lautrec, quien vivió los orígenes de su larga trayectoria desde 1889 y que ha cobrado vida por vez primera en un escenario nacional. La revista Feerie, con la coreografia de Bill Goodson, que se ha ofrecido en la localidad de Santanyí, se mantiene en cartel desde hace años en el cabaret de Montmartre y muestra la evolución del espectáculo desde sus orígenes con la canción de Frou Frou y sus cuplés hasta la actualidad de vanguardia. Vestidos de plumas y lentejuelas de precios astronómicos frente a grandes pamelas y faldas de volantes, con esculturales piernas al aire, han transportado al espectador a la magia de la mítica sala parisina, por donde han defilado grandes estrellas por espacio de cerca de una hora en un programa que cuenta con otros alicientes.
Las dos noches del viernes y el sábado han ofrecido además la orquesta en vivo Clou Experience de Alemania y los magos Erick Lantin y Valerie, con su show de prestidigitación con un trigre y una pantera. Veladas que han permitido también la degustación gastronómica en sendas cenas de gala a cargo del chef Alvaro Arbeloa, a base de especialidades mediterráneas. El pasado viernes acudieron, entre otros, el conseller de Turisme, Miquel Nadal, junto al director general de Promoció Turística, Joan Sastre, y el alcalde de Santanyí, Miquel Vidal.
Gabriel Alomar