«Nuestra institución es, cada vez más, un elefante gordo que se mueve con dificultad».
Esa fue la metáfora que utilizó ayer el portavoz de Unió Mallorquina (UM) en el Consell, Miquel Àngel Flaquer, para referirse a la percepción que tiene la ciudadanía de la Administración insular. Flaquer aprovechó el pleno celebrado para abordar la situación de crisis económico para instar a la presidenta Armengol a agilizar los trámites, incluidos los pagos a proveedores, e implantar la administración electrónica.
UM, sin embargo, no fue crítica con el diagnóstico de la presidenta sobre la crisis ni con las medidas que ha puesto en marcha. El PP, por ejemplo, esperaba algún 'aviso' que finalmente no se produjo. Y eso que Jaume Font, portavoz de los 'populares intentó en varias ocasiones enfrentar a UM con Armengol, aludiendo a la «falta de respeto» con la que, en su opinión, habían tratado los socialistas a la gestión de Unió Mallorquina en el pasado mandato.
Armengol recordó que quien había criticado a UM era el PP y afirmó que tiene responsabilidad sobre el 'agujero' del anterior mandato, sobre todo en el área de servicios sociales, que gestionaba en exclusiva. El pleno de ayer se había convocado, a propuesta del PP, para debatir sobre la crisis económica pero sobre la sesión planeó el clima de tensión política.
Según la tesis del PP, el Consell gasta como si no existiera la crisis. Armengol tildó de «demagógicas» e «irrealizables» las propuestas del PP.
Armengol recordó al PP que el presupuesto de este año del Consell, de 393 millones de euros, prevé un aumento de obra pública en un 141 por ciento y un 25 por ciento para las políticas sociales.
Además del presupuesto ordinario, la institución dispondrá de 47 millones de euros más para hacer frente a esta situación.
Según Font, tras varios meses, el gobierno de esta institución no ha querido llegar a un acuerdo con la oposición para aprobar un plan de ayuda anticrisis ante una situación económica «muy difícil». Según Antoni Alemany, responsable de Hacienda, no es preciso un plan concreto anticrisis, ya que se está actuando.
El portavoz de los 'populares' había abierto el debate bien parapetado con gráficos y estadísticas sobre la diferente situación económica del momento en que Armengol asumió la presidencia y la actualidad. Por momentos, habló como si se dirigiera al Parlament, con cifras referidas a Balears, y pareció hacer responsable a la dirigente socialista de la situación.
Armengol dijo que ante una crisis económica mundial, la institución tiene poco margen e insistió que extendía la mano al partido de la oposición. Font se preguntó si más que tenderle la mano, no se la acercaba al cuello.
Para el portavoz del PP, en estos momentos no tiene demasiado sentido la televisión que gestiona el Consell. Dijo claramente que era partidario de cerrarla y de asociarla, de alguna manera, a IB3 para las desconexiones territoriales. Según Font, «también en el Bloc» se apoya esa idea. Joana Lluisa Mascaró matizó ese comentario.
El pleno se sustanció en dos horas. Las propuestas del PP , que suponían cambiar de partida unos 40 millones, fueron rechazadas con los votos de PSOE, Bloc y UM.