Decíamos días atrás que el espacio comprendido entre principios de la calle Sant Miquel y Plaça Major de Palma viene a ser, casi a diario "sobre todo los días laborables" un museo y una gran sala de espectáculos al aire libre.
A los pintores, caricaturistas, cantantes de ópera, cantantes de soul, estatuas humanas, payasos etc., sumemos la troupe de capoeira llamada Planeta Show Capoera, integrada por tres amigos brasileños, de Bahía, Edson, Alenilson y Lázaro, que residen en Palma, uno desde hace cuatro años y los otros desde hace dos.
Uno de ellos, creo que Edson, da clases en un gimnasio, pero, generalmente, su modus vivendi lo tienen ahí, en la Plaça Major, y en las noches en las zonas turísticas hasta donde llevan su espectáculo, que podríamos decir que se divide en dos partes: la exhibición que hacen de capoeira y la invitación que hacen a los curiosos que se detienen a verlos "generalmente extranjeros" a que practiquen los ejercicios. Como no podía ser de otro modo, los hay más patosos que otros; los hay más graciosos que otros; los hay que saben moverse mejor que otros. Pero de lo que se trata es que los no iniciados vean cómo es y los iniciados que se ejerciten.
El otro día estuvimos un rato viéndolos. Seríamos uno más entre los treinta o cuarenta que nos reunimos alrededor. Nos sorprendió una espontánea, extranjera naturalmente, que sin cortarse un pelo se lanzó a la imaginaria pista siguiendo casi al pie de la letra los movimientos del brasileño. También se mueve muy bien un chavalín de no más de doce años. Por lo visto, a nada que sus tareas escolares se lo permiten, se acerca a la plaza a practicar capoeira. Empezó sin tener ni idea y sus progresos han sido notables. Pues eso, que si se anima...
Pedro Prieto