Promateb es una asociación formada por 50 submarinistas que se encargan de limpiar el fondo del mar de Mallorca de manera totalmente altruista. Utilizan su tiempo libre para reunirse en el local de Manolo Sánchez, miembro de la asociación, que se encuentra en Calvià, para planificar y realizar las diferentes inmersiones que tienen previstas para limpiar diferentes zonas de la costa mallorquina.
Estas reuniones se celebran habitualmente cada quince días. El único objetivo que persiguen es concienciar a la sociedad para que no ensucie el fondo marino, dado que actualmente está lleno de toneladas de basura. Para poder solucionar este problema nuestros protagonistas pretenden concienciar a la población de la importancia de no aumentar la contaminación en el mar.
Proyecto
Este grupo de voluntarios, en breve, presentará un proyecto al Govern balear para que tenga presente el trabajo que están realizando. Además pretenden conseguir la complicidad por parte de las instituciones, reflejada en una ayuda económica que serviría para sufragar los gastos de mantenimiento y compra trimestral de los materiales de los submarinistas, una cantidad que asciende a unos 2.000 euros aproximadamente.
En este proyecto se adjuntará un dossier fotográfico de los lugares donde se pretende realizar más limpiezas, las zonas de donde se ha extraído más cantidad de basura y también se quiere dar constancia de que la gente que da su apoyo desde la costa, el tiempo que estén esperando la llegada de las embarcaciones con la basura, limpien la zona de la costa de donde se encuentren ya que entre las rocas también se acumulan botellas de refrescos, plásticos o latas.
Complicado
El trabajo que realizan estos voluntarios es muy complicado ya que muchas veces las condiciones climatológicas no acompañan para que las embarcaciones cooperen con ellos. Desde el momento en el que se reunieron este grupo de submarinistas creando la asociación Promateb han realizado alrededor de 50 limpiezas por las costas de la Isla de Mallorca. En las diferentes inmersiones, como la realizada en la Cala Figuera de Santanyí, donde se encontró basura de todo tipo, como una escalera, una hamaca, una alfombra o tuberías.
A este grupo de voluntarios no les preocupa que les paguen por la limpieza del fondo marino que están realizando ya que ellos lo hacen con el único objetivo de concienciar a turistas y población en general para que no se siga contaminando mar.
Tomás Llinás/Alberto Segovia