La cirugía coronaria del Hospital Universitario Son Dureta registra los índices de mortalidad más bajos del Estado, según informó ayer el conseller de Salut i Consum, Vicenç Thomàs, durante su visita al Servicio de Cirugía Cardiaca, inaugurado hace cinco años.
«Desde la puesta en marcha de este Servicio en 2003 -declaró Thomàs- ha fallecido un 0'89% (siete personas) de los 787 pacientes operados hasta la fecha, más de tres puntos por debajo de la media estatal, que se sitúa en el 4%». El primer año se efectuaron 102 operaciones; en 2004 fueron 170, otras 154 en 2005, 173 más en 2006 y 188 el año pasado. «En total casi 800 intervenciones -dos de cada tres son hombres-, en las que se han conseguido los mejores resultados de todo el país», añadió.
Estas cifras fueron ratificadas por el doctor Oriol Bonnín, jefe del Servicio de Cirugía Cardiaca, quien reconoció que cada vez hay más pacientes de edad avanzada y con más dificultades para ser intervenidos quirúrgicamente, algo que achacó a que «hoy la gente vive más años» y también a que mucha gente mayor viene de fuera a Mallorca para vivir su retiro, «porque aquí se vive muy bien».
No obstante, Bonnín aseveró que Balears no es la comunidad con más enfermedades coronarias y que, sobre todo, es necesario tener en cuenta que «la edad no limita la cirugía coronaria».