M.JUNCOSA
La construcción balear entrará en crisis o en recesión técnica después de que registre tasas de crecimiento económico negativas durante el segundo y el tercer trimestre de este año, una situación que se prolongará al menos hasta finales de año, según anunció ayer el director general de Economía del Govern, Andreu Sansó, durante la presentación del informe de coyuntura del Ejecutivo, correspondiente al primer trimestre del presente año.
El director general indicó que el Govern no sabe cuánto tiempo durará esta situación aunque admitió que los indicadores adelantados de la actividad en la construcción siguen una evolución negativa, especialmente en el sector residencial, con una caída de la inversión en viviendas del 29,1 por ciento en el primer trimestre, según datos del Colegio Oficial de Arquitectos de Balears.
En todo caso, Sansó confió en que el Plan de Choque del Govern, con 1.200 millones de inversiones públicas en lo que queda de año y el que viene y el pago de deudas a las constructoras de Balears, contribuya a paliar la caída de actividad del sector de la construcción en las Islas.
En todo caso, el informe de coyuntura del Govern admite que la contracción de la actividad económica en la construcción ya se ha trasladado al mercado laboral balear, con una caída de afiliaciones a la Seguridad Social de un 0,7 por ciento en el primer cuatrimestre y un incremento interanual de paro superior al 80 por ciento en el mes de junio.
El director general de Economía del Govern afirmó que el Ejecutivo autonómico no espera que la economía balear en su conjunto vaya a entrar en recesión o crisis económica en lo que queda de 2008 ni tampoco en 2009, ya que el sector servicios seguirá creciendo y el sector de la construcción tiene un peso limitado en la estructura económica, de entre el 10 y el 12 por ciento en términos de producto interior bruto.
En este sentido, Sansó recordó que la economía balear está más ligada en su evolución al comportamiento de las economías de sus principales mercados emisores de turistas, Alemania y Reino Unido, que a la española y señaló que éstas están en una situación de crecimiento económico.
Pese a estas consideraciones, el informe de coyuntura del Govern indica que el sector servicios redujo en cinco décimas su tasa de crecimiento en el primer trimestre de este año, al pasar de un 3,1 por ciento a un 2,6 por ciento. El director general de Economía indicó que dentro de la heterogeneidad de actividades integradas en este sector, el más importante de la economía con un peso del orden del 80 por ciento del Producto Interior Bruto, las que han sufrido mayores caídas de actividad han sido las ligadas a la actividad inmobiliaria, caso del comercio de equipamientos del hogar u otras similares.
En cuanto a la actividad turística, los datos del Govern indican que los tres principales mercados emisores de turistas registran una evolución positiva en cuanto a llegadas a Balears, resaltan que los pasajeros de cruceros turísticos presentan un crecimiento del 22,5 por ciento en los primeros cinco meses del año y que entre abril y mayo los ingresos hoteleros han aumentado a mayor ritmo que los precios.
También dentro del sector servicios, la actividad comercial se ha visto afectada por las subidas de precios generalizadas, por el mayor endeudamiento de las familias motivado por las subidas de los tipos de interés y por el endurecimiento de las condiciones de crédito. En cuanto a su evolución, hasta el mes de mayo el índice de ventas al detalle ha caído un 5,9 por ciento en Balears.
Otro de los datos que evidencian la desaceleración económica balear es el tráfico de mercancías, que ha experimentado un descenso del 8 por ciento en el acumulado de los cinco primeros meses del año en el global de los puertos de Balears.