Mallorca Republicana organizó ayer su tercera fiesta republicana en ses Voltes. Los republicanos de la Isla cuestionaron lo que definen como «objetos sagrados ungidos de infalibilidad», esto es, «España, la monarquía y los beneficios de las empresas». «Vivimos en un tiempo en el que cuestionar comporta riesgos», alega el manifiesto del encuentro.
En el mismo se denunció la «quiebra de las reglas de juego que finalmente posiblilita el encarcelamiento de 23 dirigentes políticos quienes representan al 15% de la población vasca, la actuación judicial frente a la protestas antimonárquicas en Catalunya o las actuaciones contra la revista 'El Jueves'».
Miquel Cruz, portavoz de Mallorca Republicana, aseguró que el pensamiento crítico en la sociedad actual es esencial, en este sentido «la monarquía es un símbolo», apuntó.
La fiesta organizaza en ses Voltes incluyó diferentes actividades y una comida al aire libre.