El PP balear, a través de su secretario general, José María Rodríguez, calificó ayer de «excepcional» que un militante pueda declarar como domicilio la sede del partido. Rodríguez explicó que, en alguna circunstancia muy especial, un militante puede dar la dirección de la sede porque no quiere que se sepa en su puesto de trabajo que está afiliado a un partido político. En cambio, sí está permitido que un militante dé como dirección su despacho profesional, pero no es el caso de los casi medio centenar de afiliados de PP-Calvià que han declarado la sede como domicilio la sede. En algunos casos, estos militantes trabajan en el Ajuntament de Calvià, pero no en la sede.
En los mismos términos que Rodríguez se manifestó ayer Francesc Fiol, organizador del congreso del PP balear. Fiol considera que «no es lo habitual» que los militantes den la dirección de la sede del partido como domicilio particular, aunque prefirió mantenerse al margen.
Mientras tanto, Carlos Delgado aprovechó ayer una rueda de prensa para arremeter contra este diario por desvelar el domingo que un importante número de militantes han declarado que su domicilio está en la sede. Delgado dice que se está infringiendo la ley de protección de datos cuando en ningún momento se difundieron nombres y apellidos de los beneficiarios de esta situación tan anómala. En los listados, en contra de la versión del PP-Calvià, tampoco figuran cuentas bancarias, tal y como denunció en un comunicado que no fue remitido a este diario.