La casualidad nos lo puso delante después de haberlo buscado desde el pasado lunes, en que, a primeras horas de la mañana, casi a la misma hora que lo hizo Rafa Nadal, llegó a Mallorca en compañía de sus padres. Sabíamos que Ana Obregón, su novia y lanzadora al estrellato, no llegaba con ellos, ya que al dia siguiente viajaba a Miami, por unos asuntos. Por tanto, los Darek, no irían a parar a El Manantial, la residencia de los García Obregón en Costa de los Pinos, pero seguramente si en algún lugar de los alrededores, que no fue otro que un hotel repleto de guiris donde pasaron completamente desapericibidos. Bueno, lo que se dice “completamente", no. Sobre todo él, dadas sus condiciones físicas a lo que hay que sumar un rostro que roza la perfección, y que desde luego entre las mujeres no deja indiferente a ninguna. Igual que a los hombres.
Desde que tomaron posesión de sus habitaciones, el novio prefirió la piscina al Mediterráneo, que tenía, como quien dice, enfrente. No así sus padres, que algunos medio días, en lo que el chico seguía soleándoe en la tumbona y remojándose en la enorme pileta, optaron por dar una vuelta por la orillita, haciéndose alguna que otra fotografía.
Como saben nuestros lectores, incluso los que dicen que sólo ven la segunda cadena y los canales temáticos, Darek es el novio de Ana Garcia Obregón desde el pasado mes de enero, que fue cuando lo presentó en sociedad. Que duda cabe que el joven polaco causó sensación, a la vez que ella envidiada, sobre todo entre las damas.