La Conselleria de Turisme espera una avalancha de peticiones de regularización de viviendas vacacionales durante septiembre, último mes que tiene esta oferta turística para solicitar la acreditación de calidad turística, requisito imprescindible para poder seguir comercializándose bajo esta modalidad turística. Ayer, quince establecimientos de Mallorca recibieron de manos del conseller de Turisme, Joan Flaquer, esta acreditación, de un total de 1.700 existentes en la Isla.
El acto de entrega tuvo lugar en la sede de Inestur, en el ParcBit, y contó con la presencia del director general de Ordenación, Josep Aloy, así como el director de Inestur, Carlos Pizá, y los alcaldes de Manacor, Santanyí, Pollença y Son Servera, municipios en los que están ubicados los 15 establecimientos.
Flaquer anunció que todas aquellas viviendas que el próximo 26 de septiembre no estén amparadas por la acreditación derivada de la Ley de Comercialización de Estancias Turísticas en Viviendas, tras haber tenido seis meses para regularizarse, «el Govern entenderá que realizan un uso exclusivamente residencial, por lo que perderán el uso turístico y no podrán comercializarse como viviendas vacacionales».
Una vez finalice este plazo, se tendrá un registro fiable de viviendas vacacionales en las Islas, que superan las 2.500. El objetivo es que esta oferta cumpla los requisitos turísticos y no haga la competencia desleal a la oferta reglada.