Las restricciones en ferias, mercados y explotaciones avícolas por la gripe aviar se mantendrán hasta el próximo 31 de mayo.
Esta decisión fue tomada ayer por la comisión balear de seguimiento de la gripe aviar, que cuenta como máximos responsables a los directores generales de Salut, Antoni Pellicer; Protecció d'Espècies, Antoni Gómez; y Agricultura, Joan Carles Torrens, si bien se trata de una medida determinada por el Gobierno central a instancias de la Unión Europea.
De esta manera, las explotaciones avícolas de los cinco municipios que circundan la Albufera d'Alcúdia (Pollença, Alcúdia, sa Pobla, Muro y Santa Margalida) no pueden tener sus animales al aire libre. De momento, estos cinco municipios constituyen la única zona de riesgo de gripe aviar en Balears, si bien existen otras áreas de especial atención, siempre próximas a zonas húmedas y donde acuden aves migratorias.
En ferias y mercados se prohíbe la presencia de anátidas y para el resto de aves hay que elaborar memorias sanitarias y aplicar controles veterinarios. En los cinco municipios de la zona de riesgo, las aves expuestas en ferias o puestas a la venta en mercados deben estar a cubierto y encerradas, y no pueden mezclarse unas especies con otras.
La prolongación de las restricciones hasta el 31 de mayo obedece a que las aves migratorias que ahora se encuentren en el sur de Àfrica retornan a sus lugares de origen en Asia y Europa. En el continente africano conviven y se mezclan unas con otras, por lo que cabe la posibilidad de contagio por parte de portadoras del virus, aunque un animal enfermo difícilmente puede volar largas distancias.