Ya es oficial. El Govern balear ha anunciado su renuncia a construir la polémica autovía Inca-Manacor durante esta legislatura. La oferta realizada por el president Jaume Matas a Francesc Antich para no hacer esta obra a cambio de inversiones adicionales del Ministerio de Fomento ya indicaban la disposición del Govern a aplazar las obras. Ahora, sin obtener la respuesta de los socialistas, el Ejecutivo ha anunciado oficialmente que las obras no comenzarán esta legislatura.
Al margen de la gran controversia ciudadana que suscitó la posible construcción de este eje viario, la Conselleria d'Obres Públiques que dirige Mabel Cabrer considera que, dada la difícil situación jurídica y política en la que se encuentra el convenio de carreteras, es imposible materializar la construcción de esta autovía en la presente legislatura.
«La autovía entre Inca y Manacor no se hará esta legislatura aunque a la larga se demostrará que es absolutamente necesaria», señalaron la consellera Mabel Cabrer y el director general d'Obres Públiques del Govern, Carlos Jover. «Estamos dispuestos a negociar con el Ministerio para tratar de desbloquear el convenio, pero, antes de acometer la autovía Inca-Manacor, nuestra prioridad absoluta es construir el segundo cinturón», aseguró Cabrer.
Por lo tanto, una vez que se ejecuten las obras ya iniciadas en las autopistas a Llucmajor, Santa Ponça y el tercer carril de la autopista a Inca, además de la prolongación hasta Sa Pobla, la siguiente obra que quiere acometer la Conselleria es la construcción del segundo cinturón.